EL CAMINO DEL ÉXITO
El límite de tu sueño es el cielo: “¿Qué hare para estar en el
cielo? (Mc 10,17); ”“Sin mi nada podrán hacer” (Jn 15,5); “Trata a los demás
como ellos quieren que te trate” (Mt 6,12); “ Cuando hayas hecho lo mandado di,
soy siervo inútil porque solo hice lo que tenía que hacer” (Lc 17,10) “Todo lo
que hagas, hazlo con amo” (I Cor 16,14)
Para lograr triunfar en la vida primero tenemos que sembrar las
semillas: aprendiendo a dar y a vivir de acuerdo con la ruta de la Excelencia,
la cual tiene muchos senderos y un solo destino... Dios. “Se cosecha de lo que
siembra” (Mt 7,16).
PAUTAS DEL
CAMINO A LA FELICIDAD:
Servicio. Nuestra recompensa en la vida está en relación
directa con el servicio que proporcionamos a nuestros semejantes; aprovecha más
el que sirve mejor. “El que quiera ser grande, que se haga servidor; y el que
quiera ser el primero que se haga esclavo de todos: como el Hijo del hombre, no
vino para ser servido, sino para servir y dar su vida en rescate por muchos"
(Mt 20,27-28).
Valor Agregado. Sea un 1% mejor todos los días en cada una de
sus actividades, adicione ese algo más que hace la diferencia. "Señor,
cinco talentos me entregaste; he aquí otros cinco talentos que he ganado sobre
ellos" (Mt 25, 20).
Compromiso. Hágase indispensable siendo un ser de
soluciones y no de problemas; nadie contrata a una persona para que le cause
problemas, sino para que encuentre respuestas. Los jornaleros no encontraron
trabajo y se quedaron todo el día esperando en la plaza. El año salió a ultima
hora y al verlos: “Por qué están aquí todo el día, sin trabajar? Respondieron:
nadie nos ha contratado. Y les dijo: vayan a mi viña a trabajar y los pagare lo
debido” (Mt 20,6).
Trato. Trate a los demás como los seres más
importantes sobre la faz de la Tierra, "sé con tu prójimo como lo eres
contigo mismo"; muchos pueden actuar servicialmente, rara es la persona
que piensa servicialmente. “Trata a los demás como ellos quieren que los trate”
(Mt 7,12).
Aprendizaje. Cuando algo falle hay que asimilar la lección y
adelante, ¡ánimo!; un error reconocido es una victoria ganada. “Soy el último
de los Apóstoles, y ni siquiera merezco ser llamado Apóstol, ya que he
perseguido a la Iglesia de Dios. Pero por la gracia de Dios soy lo que soy“ (I
Cor 15,9-10).
Crisis. Los problemas para el ser excelente son
oportunidades no resueltas; la dirección se aprende dirigiendo y se aprende
mejor en medio de obstáculos. “16:23 Pero él, dándose vuelta, dijo a Pedro:
"¡Retírate, ve detrás de mí, Satanás! Tú eres para mí un obstáculo, porque
tus piensan como los hombres y no como Dios" (Mt 16,23).
Acción. El triunfador y el perdedor tienen los mismos
problemas, la diferencia está en que el triunfador actúa para resolverlos y el
fracasado se deja invadir por la duda y se queda pensando. “Quien observa el
viento no siembra, quien mira la nube no cosecha” (Ecl 11,4)
Actitud
mental. No pierda
el tiempo lamentándose de sus problemas, mejor resuélvalos; es preferible
encender una vela que maldecir las tinieblas. “Aun que camine por cañadas
oscuras, nada temo Señor, porque tu vara y tu cayado me sostiene” (Slm 23).
Capacitación. Pregúntese todos los días cómo puede ser mejor
que ayer, invierta en su preparación. Como la tierra por más rica que sea no
puede dar frutos sino es cultivada, la mente sin cultivo tampoco puede
producir. "Cuando un maestro en religión ha sido instruido en el reino de
los cielos se parece a un padre de familia que saca de sus reservas lo nuevo y
lo viejo" (Mt 13,52).
Preparación. Prepárese para aprovechar las oportunidades,
busque la buena suerte, inevitablemente la encontrará; la fortuna siempre
favorece a la mente preparada. “El ciego Bartimeo al enterarse de que pasaba
Jesús, el Nazareno, se puso a gritar: "¡Jesús, Hijo de David, ten piedad
de mí! Muchos lo reprendían para que se callara, pero él gritaba más fuerte:
"¡Hijo de David, ten piedad de mí! Jesús se detuvo y dijo: ¿Qué quieres
que haga por ti?". Él le respondió: "Maestro, que yo pueda ver".
Jesús le dijo: "Vete, tu fe te ha salvado" (Mc 10,47-52).
Superación. Haga hoy su trabajo mejor que nunca, recuerde
que siempre habrá una mejor forma de hacer las cosas. “Todo lo que hagan, háganlo
con amor” (I Cor 16,14).
Reto. Desafíe sus limitaciones y no se bloquee
pensando por qué no se puede lograr; sólo los audaces llegan a la cumbre. “Sed
perfectos como vuestro padre celestial es perfecto” (Mt 5,48).
Audacia. Inicie cada día la aventura extraordinaria,
viva intensamente cada minuto de su existencia, atrévase a ser un triunfador.
“No
te dejes vencer por el mal. Por el contrario, vence al mal, haciendo el bien”
(Rm 12,21).
Constancia. Para obtener el éxito haga de cada hora de su
vida un triunfo, sumará al final de la jornada: un día de Excelencia, así una
semana, un mes, un año, una vida de éxito. El éxito se alimenta del éxito. “Ustedes
serán odiados por todos a causa de mi Nombre, pero el que persevere hasta el
fin se salvará” (Mt 10,22).
Trabajo. Si usted desea ganar más recuerde la más simple
de las fórmulas: trabaje más y en forma más inteligente; el éxito no sólo
requiere de un mayor esfuerzo, use los talentos que tiene. “Cuando
hayan hecho todo lo mandado, digan: Somos siervos inútiles porque solo hemos
hecho lo que teníamos que hacer" (Lc 17,10).
Ascenso. Recuerde que su jefe inmediato es su cliente,
proporciónele satisfacción y él se encargará de promoverlo. Con tiempo y
trabajo se consigue lo que la fuerza y el afán persiguen. “Jesús entró en Jericó
y atravesaba la ciudad. Allí vivía un hombre muy rico llamado Zaqueo, que era
jefe de los publicanos. Él quería ver quién era Jesús, pero no podía a causa de
la multitud, porque era de baja estatura. Entonces se adelantó y subió a un
sicómoro (árbol) para poder verlo, porque iba a pasar por allí. Al llegar a ese
lugar, Jesús miró hacia arriba y le dijo: "Zaqueo, baja pronto, porque hoy
tengo que alojarme en tu casa" (Lc 19,1-5).
Honestidad. Es el camino más digno a la riqueza, inicie
siendo honrado consigo mismo, no se autorrobe su tiempo y su desarrollo; cuando
se pierde la fe y el honor desaparece, entonces muere el hombre y surge la
bestia. “Jesús dijo a aquellos judíos que habían creído en él: Si ustedes permanecen
fieles a mi palabra, serán verdaderamente mis discípulos: conocerán la verdad y
la verdad los hará libres" (Jn 8,31-32).
Tiempo. Es su mayor riqueza, inviértalo adecuadamente;
siempre tendrá tiempo suficiente si lo emplea como es debido. “Hay un
momento para todo y un tiempo para cada cosa bajo el sol: un tiempo para nacer
y un tiempo para morir, un tiempo para plantar y un tiempo para cosechar,
tiempo de reír, tiempo de llorar…” (Ecle 3,1-8).
Motivación. Motívese diariamente, inicie el día con una
sonrisa, es la prenda más bella que podemos lucir ante los demás, empaque sus
problemas en la bolsa y sonría, sonría, sonría. “ Si Dios está con nosotros, ¿quién
contra nosotros?¿Quién podrá entonces separarnos del amor de Cristo? ¿Las
tribulaciones, las angustias, la persecución, el hambre, la desnudez, los peligros…”
(Rm 8,35).
Alegría. Disfrute alegremente todo lo que haga, descubra
que trabajar arduamente es divertido. Es más acertado conservar intacta la
capacidad de disfrutar que ganar un montón de dinero. “Estén alegres siempre en
el Señor, lo repito estén alegres “ (Flp 4,4).
Plenitud. Procure vivir plenamente, sólo el día de hoy
viva como si esperara a cumplir los 100 años, pero estuviera listo a morir
mañana. “6:31 No se preocupen: "¿Qué comeremos, qué beberemos, o con qué
nos vestiremos?" Los paganos van detrás esas cosas. El Padre que está en
el cielo ya sabe lo que le hace falta. Busquen primero el Reino y su justicia,
y todo lo demás se les dará por añadidura. No se inquieten por el día de
mañana; el mañana se inquietará por sí mismo. A cada día le basta sus problemas”
(Mt 6,31-34).
Objetivos. Todos los días haga una lista de las cinco
cosas más importantes que tenga que realizar y hágalas, es la forma de dar
sentido diario a nuestras vidas, es joven a cualquier edad el que hace planes
para mañana. “Un hombre le preguntó: "Maestro, ¿qué obras buenas debo
hacer para conseguir la Vida eterna? Jesús le dijo: "¿Cómo me preguntas
acerca de lo que es bueno? Uno solo es el Bueno. Si quieres entrar en la Vida eterna,
cumple los Mandamientos" (Mt 19,16).
Misión. Descubra cuál es su misión en la vida: en su
trabajo, con sus amigos, su pareja, su familia y su Nación, piense cómo le
gustaría ser recordado. “No hay amor más grande que dar la vida por los amigos.
Ustedes son mis amigos si hacen lo que yo les mando” (Jn 15,13-14).
Vocación. Decida ser un ser de Excelencia aquí y ahora;
la Excelencia es un llamado universal y el hombre es un pedazo del universo
hecho vida, una vida dedicada a la Excelencia. “Hay diversidad de dones, pero
todos proceden del mismo Espíritu. Hay diversidad de ministerios, pero un solo
Señor. Hay diversidad de actividades, pero es el mismo Dios el que realiza todo
en todos. En cada uno, el Espíritu se manifiesta para el bien común” (I Cor
12,4-7).
Fe. Recuerde que usted se convertirá
inevitablemente en lo que piensa de usted mismo, pues lo que la mente del ser
humano puede crear y creer, su corazón lo logrará. “El hombre bueno saca el
bien del tesoro de bondad que tiene en su corazón. El malo saca el mal de su
maldad, porque de la abundancia del corazón habla la boca” (Lc 6,45).
Trascendencia. Usted es importante, condúzcase en todo lo que
haga como lo que es: un ser extraordinario, que su vida no sea un fugaz
chispazo, sino una antorcha que alumbre por siempre. “Ustedes son la sal de la
tierra. Pero si la sal pierde su sabor, ¿con qué se la volverá a salar? Ya no
sirve para nada, sino para ser tirada y pisada por los hombres. Ustedes son la
luz del mundo. No se puede ocultar una ciudad situada en la cima de una montaña”
(Mt 5,13-14).
Sueño. Tenga un ideal en la vida, un motivo para
luchar; un sueño por realizar y tendrá una razón para vivir; descubramos
nuestros sueños y vivamos para verlos, con los dos pies en la tierra, con el
alma en las estrellas. “El amo repartió sus bienes, a uno le dio cinco
talentos, a otro dos, y uno solo a un tercero, a cada uno según su capacidad; y
después partió. En seguida, el que había recibido cinco talentos, fue a
negociar con ellos y ganó otros cinco. De la misma manera, el que recibió dos,
ganó otros dos, pero el que recibió uno solo, hizo un pozo y enterró el dinero
de su señor” (Mt 25,15-18).
Dios: Dedique un poco de tiempo todos los días para
estar cerca y a solas con el Creador, es la fuente inagotable del amor,
recuerde que su vida es un cuento de hadas escrito con el dedo de Dios y a
usted le corresponde hacerlo realidad. “Ellos le preguntaron: ¿Qué debemos
hacer para actuar en la voluntad de Dios? Jesús les respondió: "La
voluntad de Dios es que ustedes crean en aquel que él ha enviado" (Jn
6,28-29).